jueves, 4 de marzo de 2021

El hospital de Apartadó no puede quedar en una maqueta

Se ha perdido un tiempo invaluable desde el gobierno de Eliecer Arteaga y, ya llevamos un año de la actual administración y el proyecto sigue bloqueado en algún lugar de la burocracia.

Editorial de marzo, 2021
El Pregonero del Darién
Por: Wilmar Jaramillo Velásquez

Arriesgándonos a la avalancha de críticas “Por no dejar trabajar, por poner el palo en la rueda, por ser unos resentidos” y todos esos términos que acuñaron los lava perros de los alcaldes, hoy parte de nuestro folclor y paisaje político, nos vemos en el deber y la obligación de preguntarnos, qué es lo que está pasando en realidad, qué es lo que hay de fondo en el proceso de construcción de un nuevo hospital para Apartadó.

En la anterior administración, se habló mucho del nuevo hospital, hubo un enorme desgaste en presupuesto e inversión técnica, pero finalmente se estableció que los diseños nunca fueron aprobados y que el presupuesto anunciado por el entonces gobernador Luis Pérez, se quedó en un titular de periódico.

Cuando se inicia la nueva admiración, el alcalde prende motores de nuevo en procura de sacar adelante el proyecto, incluso lo convierte en una de sus banderas de gobierno.


Wilmar Jaramillo Velásquez
Director de El Pregonero del Darién

El punto más alto del proyecto se vive en Apartadó, cuando con la presencia del señor presidente de la República, Iván Duque, varios altos dignatarios de su gobierno, el gobernador de Antioquia, Aníbal Gaviria Correa, empresarios y el propio Felipe Cañizalez se hacen importantes anuncios para consolidar la obra.

El gobierno departamental aportaría diez mil millones de pesos, el municipio, seis mil, la Fundación Rosalba Zapata, cuatro mil millones y el Ministerio de Salud se comprometió con 24 mil millones, además, quedaría operando una mesa conjunta, con miembros del gobierno nacional, departamental y municipal, trabajando en el tema. Eso fue lo que se conoció hace un año.

Uno esperaría que, con parte del proyecto, al menos de diseños, avanzados en el anterior gobierno y con semejantes padrinos, con presidente abordo, la obra se dispararía de tal manera que ya deberían haber iniciado hace mucho rato.

Más no ha sido así, siguen caminando para el Ministerio de Salud, siguen devolviendo planos y diseños, siguen poniendo trababas de allí, de acá y de más allá y, nada que arranca tan importante proyecto para Urabá en materia de salud.

La semana pasada en la ciudad de Bogotá, me decían en un diálogo de amigos, que los retenes enquistados al interior del Ministerio de Salud para dar viabilidad a estos proyectos son muy costosos, que las cuotas de corrupción a pagar en estos peajes son de alto vuelo y nos resistimos a creer que esto sea lo que entorpece el proyecto, sobre todo cuando sabemos que ahí está el presidente Duque y el entonces senador Álvaro Uribe, quien conoce al dedillo este asunto, como lo veremos en un análisis periodístico publicado en nuestro portal de noticias: www.elpregonerodeldarien.com.co

En la edición de nuestro periódico El Pregonero del Darién del mes de marzo del 2020, publicamos en primera página, a dos líneas y cinco columnas: Apartadó tiene asegurado un nuevo hospital e hicimos amplia reseña del tema tratado en la visita presidencial.

Por eso nos preocupa la paquidermia, la pereza estatal con la cual se mueven estos procesos en el país, primero le echan la culpa a la pandemia, luego al año electoral y así van dilatando el tema hasta que muy probablemente y, el paso que vamos al señor señor alcalde escasamente le corresponderá colocar la primera piedra como premio de consolación.

El señor alcalde de Apartadó está rodeado de un importante grupo parlamentario al cual se le debe dar la misión de ponerse al pie de este hospital, que en bloque indague, qué está ocurriendo en el Ministerio de Salud, dónde están los recursos, si ya están asignados, para que estos no se conviertan en un titular más de prensa como quedaron en el triste recuerdo de Luis Pérez.

Tampoco tenemos la menor duda en el equipo profesional y técnico responsable de estudios y diseños, pues su experiencia y transparencia son de dominio público.

Lo que no queremos es que un proyecto de tamaña magnitud, se quede en una vistosa maqueta, como han quedado el 60% de las obras en Colombia en las últimas décadas. En el siguiente enlace, se puede apreciar parte de los diseños iniciales: Clic aquí